Lee atentamente la siguiente lectura y luego responde las preguntas.
Los eclipses
Los eclipses, tanto solares como lunares, siempre han fascinado y aterrorizado a la humanidad. Son fenómenos naturales que en la actualidad la ciencia sabe explicar. Pero no siempre fue así. Durante miles de años, casi todas las civilizaciones los han interpretado como una maldición, una señal del enfado de los dioses. Ver el día convertirse en noche, o la luna “sangrar”, era para asustarse.
Pero los eclipses también han servido para salvar vidas. Sin duda, la más insigne es la de Cristóbal Colón. El descubridor del “Nuevo Mundo”, estuvo a punto de no regresar de su cuarta expedición. Sufrió varios percances durante esta travesía y los navíos acabaron encallados en las costas de Jamaica en junio de 1503. El trato del almirante con los nativos siempre había sido tenso. Sin embargo, durante las primeras semanas, los indígenas de la isla trataron con cierta hospitalidad a los navegantes.
Las disputas internas y envidias dentro de la recién creada casta colonial española hicieron que el rescate de Colón y sus hombres se prolongara en exceso. Así, en febrero de 1504, la situación para el almirante era desesperada. La relación con los nativos se había deteriorado tanto, que la confrontación parecía inevitable. Sus hombres, bastante debilitados por la escasa alimentación, se habían dividido e incluso amotinado.
En esas circunstancias extremas, Colón recurrió a su ingenio. Como todo buen navegante, llevaba condigo un almanaque en el que se predecían las fases de la Luna y las posiciones de las estrellas tan necesarias para conocer el rumbo durante una travesía. De esta forma, Colón tuvo conocimiento de un eclipse lunar que se produciría unos días más tarde.
El almirante de la Mar Oceánica se reunió con el cacique indígena y le advirtió del enfado de su Dios por el nefasto trato otorgado a los españoles. Y lanzó la amenaza: la Luna se borraría del firmamento como castigo. Efectivamente, al llegar la noche, la Luna comenzó a desaparecer. Aterrados, los nativos prometieron a Colón satisfacer cualquier petición a cambio de que intercediese por ellos ante su Dios.
Gracias a la astucia de Colón, los expedicionarios mejoraron sus condiciones alimentarias hasta que fueron rescatados en junio de 1504 un año después del naufragio.
Cuatro siglos más tarde, fue un capitán belga, Albert Paulis, quien utilizó la misma argucia para evitar ser devorado junto a sus 20 hombres por caníbales del Congo en 1905. El eclipse lunar resultó, una vez más, una bendición.
Señala el significado de la palabra ENCALLAR de acuerdo a la lectura.