La novedad de los años cincuenta fue que los jóvenes de clase media, por lo menos en el mundo anglosajón, marcaban cada vez más la pauta universal de un nuevo estilo de modernidad en las costumbres.
Por ejemplo en la ropa, e incluso en el lenguaje de la clase baja urbana. La música rock fue el caso más sorprendente: a mediados de los años cincuenta surgió del gueto de la “música étnica", propia de los negros norteamericanos pobres, para convertirse en el lenguaje universal de la juventud. La revolución en las costumbres que se inicia en los años cincuenta indica: