Son algunas de las propuestas metodológicas que de acuerdo a la NEM el docente puede utilizar en el ejercicio de su práctica y que coadyuvan a que las y los
estudiantes se reconozcan como sujetos que forman parte de una comunidad, a la
cual pueden contribuir desde la escuela en su mejoramiento o en la conservación de
saberes, tradiciones y creencias, a partir de la colaboración.