... después de mucho andar y aventurar, Nawel llegó frente a una gran puerta cuadrada en aquel país lleno de sorpresas. Con voz profunda, la puerta le preguntó: “¿Queréis pasar, extranjero?” “Sí”, respondió Nawel,
casi adivinando lo que venía y ya muy cansado para devolverse. “Pues bien –dijo la puerta–, deberás hallar mis medidas, sabiendo que si a 8 veces mi área, en metros cuadrados, le restas 12 veces la medida de mi lado, tendrás nuevamente 12 veces la medida del lado”.
¿Qué le respondió Nawell a la puerta?