La organización política de la monarquía romana se basaba en tres importantes organizaciones, la primera de ella era el senado. Este tenía tres responsabilidades principales:
I. El trabajo de almacenar el poder ejecutivo.
II. Ser los consejeros del rey.
III. Formar el cuerpo legislativo.
IV. Administrar los territorios del imperio.
V. Nombrar al Dictador en caso de amenaza.