El Camino a Cristo Caps. 3-5

Hola! Gracias por regresar a la dinámica. Si leíste, sabrás cuál es el tema central del capítulo 3:

• El Espíritu Santo

• El Verdadero Arrepentimiento

• El Amor

• La Transfiguración

Seguramente no haz olvidado el título del capítulo 3, que es:

• Sabiduría para Salvar

• ¿Qué debo hacer con la duda?

• Un Poder Misterioso que Convence

• Sabiduría y Salvación Vienen de Dios

El Capítulo 3 inicia con:

• Una exclamación

• Con varias preguntas

• Ambas son correctas

Muchos se arrepienten, otros solo lo hacen por temor a sufrir. ¿Cuáles fueron los tres personajes de este tipo de arrepentimiento que no manifestó el Espíritu de Dios?

• Esaú, Balaam y Judas

• Jacob, Jonás y Balaam

• Judas, José, Balac

• Ananías, Safira y Simón el Mago

La frase: "¡Bienaventurado aquel cuya transgresión ha sido perdonada y cubierto su pecado!"

¿A que personaje bíblico pertenecen?

• Salomón

• Saúl

• David

• Sofonías

En el capitulo 4, la pluma inspirada nos dice que debemos hacer para alcanzar misericordia.

• Ayunar y Orar

• Predicar y Orar

• Tener Fe y Orar

• Confesar y Abandonar todo acto malo.

De acuerdo a la escritora del libro "El Camino a Cristo", Elena de White, ¿Cómo deben ser las confesiones de nuestros pecados?

• Públicas

• De corazón y voluntarias

• Ligeras y descuidadas

• Ninguna es correcta

En medio de sus pecados el pueblo judío confesó:

"Porque a todos nuestros pecados hemos añadido esta maldad de pedir para nosotros un rey"

¿Dónde encontramos esta cita?

• Jueces 15:10

• Salmos 50:27

• Lamentaciones 3:18

• 1 Samuel 12:19

¿Dónde se encuentra la promesa con que se da inicio al tema del capitulo 5 del libro "El Camino a Cristo"?

• Jeremías 29:13

• Joel 2:6

• Salmos 20:14

• Éxodo 21:17

Mencione los tres (3) capítulos que leímos esta semana

• -El Secreto del Crecimiento.

  -La Consagración.

  -Amor Supremo.

• -Amor Supremo.

  -La Fuente de la Vida

  -Un Poder Misterioso que Convence

• -Un Poder Misterioso que Convence.

  -Para obtener paz interior.

  -La Consagración