Se define el proyecto de vida, como la línea de conductas que sigue una persona en vista a la consecución de los objetivos consiente y voluntariamente adoptados como meta de su existencia, no son las pequeñas metas que nos fijamos para obtener resultados más o menos inmediatos, sino el objetivo final de todo lo que hacemos mientras estemos en el mundo terreno, si bien esas metas intermedias nos van conduciendo a lograr la gran meta. Es así, que los proyectos de vida, difieren de una vida a otra y están profundamente influidos por el contexto familiar, histórico, económico, político y social en que le toca vivir. Por otro lado, la escala de valores que adopte una persona será de gran influencia en la elaboración del proyecto. El proyecto de vida imprime sentido a la existencia humana y las diferencias de otras formas de vida (como el animal o la vegetal) que no son capaces de percibir un porque de lo que se hace cotidianamente la ausencia de un proyecto puede hacer caer a una persona en la angustia la depresión. Es por ello, que, para la realización de nuestro proyecto de vida, el Ser, el Aprender, el Hacer y el Convivir, se convierte en un aspecto muy importante, ya que el conocimiento no es un fin en sí mismo. Ante esto aparece la insatisfacción sin saber el porqué, sin tomar conciencia que la causa es la falta del sentido de la vida, orientada hacia el qué hacer y no al para qué del hacer. El sentido de la vida no es algo que se debe esperar hasta que ocurra, sino algo que se puede conquistar poniendo en marcha, preparándose para aprender a estudiar y preparándose para soñar y planear en forma asertiva nuestra vida.
Responder las preguntas de la 1 a la 3.
El proyecto de vida se puede definir como: