Regulaciones en materia bélica.
Punto importante fue la regulación de la guerra, fundamentada principalmente en las costumbres. Se prohibía el ataque por sorpresa.
La declaración se hacia por el rey (emperador), en algunos casos previa consulta con los ancianos y guerreros. Los representantes que tenían que transmitir esta declaración mediante tres notificaciones con veinte días de intervalo colocaban a los adversarios ante la opción de:
◦Sujetarse voluntariamente a pagar tributos.
◦A recibir un dios en su templo.
◦A mandar soldados en caso de guerra.
◦A realizar servicios de transporte.
◦A trabajar tierras de nobles.