¿Por qué el cine americano se ha impuesto de tal modo al europeo hasta el punto de amenazarlo de extinción? Algunos claman que a causa de la pura fuerza del dólar, pero esto es algo que no ha pasado en la literatura, pintura, música sinfónica, gastronomía ni periodismo. Los dólares compran casi todo, pero no aniquilan casi nada. Otros, en cambio, arguyen la más simple razón del triunfo: que las películas americanas son mejores. Sin embargo, el que una película sea considerada buena o mala es algo desesperadamente subjetivo y, además, cualquiera que sea el baremo que se aplique, es incontrovertible que bastantes películas europeas son estupendas y muchas películas americanas son pésimas. Lo que sí puede afirmarse, desde el sentido común, es que los filmes americanos gustan más a la gente. Esta respuesta, lamentablemente, simplifica el debate porque cancela otros puntos de vista como, por ejemplo, el del conocedor de la técnica cinematográfica y el del crítico. Sendos personajes no solo hablan de gustos o disgustos, sino también de encuadres, travellings, iluminación, desenfoques, tramas, entre otros recursos del séptimo arte. Su opinión importaría puesto que definitivamente su respuesta no sería tan vaga.
1. La expresión “filmes americanos” es un mecanismo léxico de tipo: