La revolución de las energías renovables requiere grandes cantidades de cobre, sin
embargo, la actual guerra comercial entre China y Estados Unidos enfrían el
crecimiento económico mundial provocando una caída del precios del metal rojizo en
cerca de un 17% en lo que va de año por temor a una reducción de la demanda de
metales industriales. Por otro parte, las empresas productoras de cobre opinan que
existe una desvinculación en el corto plazo entre el mercado físico y las fuerzas
impulsoras fundamentales del cobre. El auge en infraestructuras, la energía y el
transporte limpio, llevaran al cobre a jugar un papel mayor en la transición hacia las
energías renovables. Según el texto anterior, la demanda de cobre