Lee el siguiente texto y responde los ítems del 1 al 5.
Don Apolinar Moscote, alquiló un cuartito, a dos cuadras de la casade los Buendía. Clavó en la pared un escudo de la república, y pintó en la puerta el letrero: Corregidor. Su primera disposición fue ordenar que todas las casas
se pintaran de azul para celebrar el aniversario de la
independencia nacional. Esto molestó a José Arcadio
Buendía, quien fue a preguntarle: «¿Usted escribió este papel?». Don Apolinar Moscote, un hombre maduro,
tímido, de complexión sanguínea, contestó que sí. «¿Con qué
derecho?», volvió a preguntar José Arcadio
Buendía. Don Apolinar Moscote buscó un papel en la gaveta de la mesa y se lo mostró: «He sido nombrado
corregidor de este pueblo».
—En este pueblo no mandamos con papeles —dijo sin perder la calma
—. Y para que lo sepa de una vez, no necesitamos ningún corregidor porque aquí
no hay nada que corregir.
Entonces, hizo recuento de cómo habían fundado la aldea, de cómo se habían repartido la tierra, sin haber molestado a gobierno alguno, logrando así ser un pueblo autónomo. «Somos tan pacíficos que ni siquiera nos hemos muerto de muerte natural» —dijo —«Ya ve que todavía no tenemos cementerio».
—De modo que, si usted se quiere quedar aquí, como otro ciudadano común y corriente, sea muy bienvenido — concluyó José Arcadio Buendía—. Pero si viene a implantar el desorden obligando a la gente que pinte su casa de azul,
puede largarse por donde vino, porque mi casa ha de ser blanca como una paloma.
Don Apolinar Moscote, dio un paso atrás y dijo con una cierta aflicción: —Quiero advertirle que estoy armado.
José Arcadio Buendía no supo en qué momento se le subió a las manos la fuerza juvenil con que derribaba un caballo. Agarró a Don Apolinar
Moscote, lo levantó a la altura de sus ojos y lo sacó del pueblo.
Una semana después, Don Apolinar estaba de regreso con seis soldados, armados con escopetas, y una carreta de bueyes donde viajaban su mujer y sus siete hijas. Los fundadores de Macondo, resueltos a expulsar a los invasores, fueron con sus hijos mayores a ponerse a disposición de José Arcadio Buendía. Pero él se opuso, según explicó, porque don Apolinar
Moscote había vuelto con su mujer y sus hijas, y no era cosa de hombres humillar a otros delante de su familia. Así que decidió arreglar la situación por las buenas.
Enunciado: Según el texto, ¿en qué momento José Arcadio expresa a Don Apolinar Moscote que puede quedarse en Macondo?