LIBRO IV LA REPÚBLICA DE  . 10 PRIMERAS HOJ 10 PRIMERAS PÁGINAS

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LIBRO IV LA REPÚBLICA DE  . 10 PRIMERAS HOJ 10 PRIMERAS PÁGINAS

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Social Studies

11th Grade

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manuel gonzalez

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1.

MULTIPLE CHOICE QUESTION

3 mins • 10 pts

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LA REPÚBLICA DE PLATÓN

  1. 1)Tomando entonces la palabra Adimanto, dijo: —¿Qué responderás, Sócrates, si se te objeta, que tus gueíreros no son muy dichosos, y esto por falta suya, pues son realmente dueños del Estado, y sin embargo están pri- vados de todas las ventajas de la sociedad, no poseyendo como los demás, ni tierras, ni casas grandes, bellas y bien amuebladas; no pudiendo ni sacrificar á los dioses en una habitación doméstica, ni tener donde recibir huéspedes, ni poseer oro y plata, y en fin, nada de lo que, en opinión de los hombres, sirve para hacer una vida cómoda y agra- dable? En verdad se dirá, que los tratas como á extran- jeros, que están á sueldo del Estado sin otro destino que el de guardarle. —Añade, le dije yo, que su sueldo sólo consiste en el alimento, y además de esto que no tienen paga como las tropas ordinarias, y por lo tanto, que no pueden ni salir de los límites del Estado, ni viajar, ni regalar álibertinas, ni disponer de nada á su gusto, como hacen los ricos y los que presumen de dichosos. ¿Por qué pasas en silencio estos capítulos de acusación y otros muchos semejantes? —Unelos, si quieres, á lo que he dicho. —Me preguntas ¿qué tengo que responder á todo esto? -Sí . —Sin separarnos del camino que hasta aquí hemos se- guido , creo que encontraremos en nuestro mismo plan re- cursos para justificarnos. Por lo pronto, diremos que no seria una cosa sorprendente, que la condición de nuestros. ¿Cuál es una de las objeciones que plantea Adimanto sobre la situación de los guerreros en el Estado?

a) No tienen tierras ni propiedades

b) No reciben un salario adecuado.

c) No pueden viajar fuera de los límites del Estado.

d) Los esclavos no pueden tener privilegios y menos auspiciados por el Estado

2.

MULTIPLE CHOICE QUESTION

5 mins • 10 pts

2) página 2. guerreros fuese muy dichosa á pesar de todos estos in-

convenientes. Que de todos modos, al formar un Estado,no

nos hemos propuesto como fin la felicidad de un cierto ór-

den de ciudadanos, sino la del Estado entero, porque he-

mos creido deber encontrar la justicia en un Estado go-

bernado de esta manera, y la injusticia en un Estado mal

constituido, y por medio de este descubrimiento ponernos

suposición de decidir la cuestión que es objeto de nues-

tra polémica. Ahora bien, en este momento nuestra ta-

rea consiste en fundar un gobierno dichoso, á nuestro pa-

recer por lo menos, un Estado, en el que la felicidad no

sea patrimonio de un pequeño número de particulares,

sino común á toda la sociedad. Examinaremos bien pronto

la forma de gobierno que se opone á esta. Si nos ocupá-

ramos en pintar estátuas, y alguno nos objetara que no

empleábamos los más bellos colores para pintar las más

bellas partes del cuerpo, por ejemplo, que no pintábamos

los ojos con bermellón sino con negro, creeríamos respon-

der cumplidamente á este censor, diciéndole: no te ima-

gines que nosotros hablamos de pintar los ojos tan bellos,

que dejaran de ser ojos, y lo que digo de esta parte del

cuerpo debe entenderse de todas las demás, y así lo que

debes examinar es si damos á cada parte el color que le

conviene, de suerte que resulte un conjunto perfecto. Eso

le diría; y ahora te digo á tí otro tanto. No nos obligues

á hacer que vaya unida á la condición de nuestros guer-

reros una felicidad, que les haría dejar de ser lo que son.

Podríamos, si quisiéramos vestir nuestros labradores con

trajes talares, cargar sus vestidos de oro y no hacerles

trabajar la tierra sino por placer. Podríamos acostar al

alfarero al pié de su horno, cerca de su rueda, en reposo,

comiendo y bebiendo anchamente, y con la libertad de

trabajar cuando quisiera. Podríamos hacer dichosos de la

misma manera á todos los de las demás condiciones, para

que el Estado entero gozase de una perfecta felicidad; pero

no nos des semejante consejo, porque si le siguiésemos,

el labrador cosaria de ser labrador, el alfarero de ser alfa-

rero ; cada cual saldría de su condición, no habría ya

sociedad. Según el autor, ¿por qué no se debe buscar la felicidad individual de cada ciudadano dentro del Estado?

A) Porque los ciudadanos no merecen ser felices.

B) Porque la felicidad individual puede socavar la sociedad.

C) Porque la felicidad individual es inalcanzable en un Estado.

D) Porque la felicidad individual no es importante para el gobierno.

3.

MULTIPLE CHOICE QUESTION

5 mins • 8 pts

PÁGINA 3. pregunta 3. Además, que los otros artesanos se manten-

gan ó no en sus respectivos oficios, no es negocio de gran

importancia; que el zapatero sea mal zapatero, que se

deje corromper, ó que alguno se tenga por zapatero sin

serlo, el público no sufrirá por esto un gran daño. Pero

si los que están designados para guardar el Estado y

las leyes, sólo son guardadores en el nombre, ya conoces

que conducirán la república á su ruina, porque de ellos

es de quienes depende su buena administración y su feli-

cidad. Por consiguiente, si queremos formar buenos guar-

dadores, pongámoslos en la imposibilidad de dañar en lo

más mínimo á la comunidad. El que sea de otro dicta-

men y quiera hacer de ellos labradores ó alegres convi-

dados á una fiesta pública, tendrá en cuenta todo lo que

requiera ménos la idea de un Estado. Por lo tanto, veamos

si nuestro propósito, al establecer la clase de los guerre-

ros, es proporcionarles la mayor felicidad posible, ó si es

más bien el proveer á la felicidad de todo el Estado, y de

convencer y precisar á los guardadores y defensores de la

patria, como á todos los demás ciudadanos, á que cumplan

lo mejor posible la tarea que les está asignada; de suerte

que cuando el Estado se haya robustecido y esté bien ad-

ministrado, todos participarán de la felicidad pública,

unos más, otros ménos, según la calidad de su empleo.

—Lo que dices me parece muy sensato.

—No sé si este otro razonamiento, que es del mismo gé-

nero, te parecerá ménos exacto.

—¿De qué se trata?

—Mira si lo que voy á decir no es lo que pierde y cor-

rompe de ordinario á los artesanos.

—¿Qué es lo que les pierde?

•—La opulencia y la pobreza. ¿Cuál es la principal preocupación del autor con respecto a los guardianes del Estado?

a) Que no tengan habilidades para sus respectivos oficios.

b) Que se vuelvan corruptos o incompetentes.

c) Que abandonen su deber por fiestas públicas.

d) Que sean influenciados por otros artesanos.

4.

MULTIPLE CHOICE QUESTION

5 mins • 9 pts

PAGINA 4. PREGUNTA 4. —¿ Cómo ?

—De la manera siguiente: el alfarero, si se hace rico,

¿se ocupará mucho de su oficio?

—No.

—Se hará, por lo tanto, cada dia más holgazán y más

negligente.

—Sin duda.

—Y por consiguiente, peor alfarero.

-Sí.

—Por otra parte, si la pobreza le quita los medios de

proporcionarse instrumentos y todo lo necesario para su

arte, se resentirá su trabajo, y sus hijos y los demás

obreros á quienes él enseñe serán ménos hábiles.

—Es cierto.

—Y así, las riquezas y la pobreza dañan igualmente á

las artes y á los que las ejercen.

—Así parece.

—Hé aquí descosas en que nuestros magistrados deberán

poner gran cuidado, para que no entren en nuestro Estado.

—¿Cuáles son?

—La opulencia y la pobreza, porque la una engendra

la molicie, la holgazanería y el amor á las novedades;

y la otra este mismo amor á las novedades, la bajeza y

el deseo de hacer mal.

—Convengo en ello; pero Sócrates, te suplico, que

fijes tu atención en una cosa. ¿Cómo podrá nuestro Estado

sostener la guerra, si no tiene tesoros, sobre todo, si tiene

que habérselas con una república rica y poderosa?

—Es cierto que habrá dificultad para defenderse contra

una sola; pero se defenderá más fácilmente contra dos.

—¿Qué es lo que dices?

—Por lo pronto, si es preciso venir á las manos, nues-

tras gentes, ejercitadas en la guerra, ¿no tienen que ha-

bérselas con enemigos ricos?

-Sí.

—Pero, Adimanto, un luahador ejercitado ¿no vencerá

fácilmente á dos adversarios ricos y obesos?

—No, si ha de habérselas con los dos á la vez. ¿Cuál es el punto de vista del diálogo sobre el efecto de la riqueza en el trabajo del alfarero?

a) La riqueza hace que el alfarero sea más diligente y hábil en su trabajo.

b) La riqueza hace que el alfarero se vuelva más holgazán y descuidado en su oficio.

c) La riqueza no tiene ningún efecto en el trabajo del alfarero.

d) La riqueza hace que el alfarero trabaje más duro para mantener su estatus.

5.

MULTIPLE CHOICE QUESTION

5 mins • 8 pts

PREGUNTA 5 PÁGINA 5—Pero, Adimanto, un luchador ejercitado ¿no vencerá fácilmente á dos adversarios ricos y obesos? —No, si ha de habérselas con los dos á la vez. — ¡Qué! si tuviese libertad para huir y pudiere herir, volviéndose, al que le siguiese más de cerca, y si emplease muchas veces esta estrategia á la luz del sol y en medio de un calor ardiente, ¿le seria difícil batir á muchos, unos en pos de otros? —Verdaderamente no tendría nada de extraño. —¿Crees tú que los ricos, de que hablamos, estén más ejercitados en la lucha que en la guerra? —No lo creo. —Por consiguiente, á lo que parece, nuestros atletas se batirán sin dificultad contra un ejército de ricos dos ó tres veces más numeroso. —Estoy conforme, porque me parece que tienes razón. —Y si pidiesen socorro á los habitantes de un Estado vecino, diciéndoles lo que es verdad: nosotros no tenemos necesidad de oro ni de plata, y nos está prohibido tenerlo; venid á nuestro socorro, y os abandonaremos los despojos de nuestros enemigos; ¿crees tú que aquellos á quienes se hiciesen tales ofrecimientos, querrían más hacer la guerra á perros flacos y robustos, que unirse á ellos contra un ganado gordo y delicado? —No lo creo; pero si algún Estado vecino reúne de esa manera todas las riquezas de los demás, temo que se haga temible al nuestro. — Dichoso tú, que crees que el nombre de Estado pueda convenir á otro que al que nosotros formamos! —¿Por qué no? —Es preciso dar á los demás un nombre de significación más extensa; porque cada uno de ellos no es uno sino muchos (1), como se dice en el juego. Por lo menos (1) Expresión proverbial empleada en el juego de dados. encierra dos, que se hacen la guerra: el uno compuesto de ricos, el otro compuesto de pobres; y cada uno de ellos se subdivide en otros muchos. ¿Qué implicación tiene la metáfora del juego de dados en el texto?

a) Indica que los ricos son hábiles en la estrategia de guerra.

b) Resalta la importancia de la astucia sobre la fuerza bruta.

c) Sugiere que la guerra es un juego de azar.

d) Muestra que cada Estado está dividido en diferentes facciones.

6.

MULTIPLE CHOICE QUESTION

5 mins • 9 pts

Página 6. pregunta 6. Encierra dos, que se hacen la guerra: el uno compuesto de

ricos, el otro compuesto de pobres; y cada uno de ellos se

subdivide en otros muchos. Si los atacas á todos, como si

formaran un solo Estado, no conseguirías tu objeto; pero si

consideras cada uno de estos Estados como compuesto de

muchos, y abandonas las riquezas á los unos, el poder y

la vida á los otros, tendrás siempre muchos aliados y

pocos enemigos. Todo Estado gobernado por leyes sábias,

como las nuestras, será muy grande, no digo en aparien-

cia, sino en realidad, áun cuando no pueda poner sobre

las armas más que mil combatientes. Con dificultad en-

contrarás otro mayor entre los griegos y los bárbaros,

aunque haya muchos que parezcan serlo. ¿Crees tú lo

contrarío ?

—No, seguramente.

—Ya tenemos fijado el límite más perfecto, que nues-

tros magistrados pueden poner al acrecentamiento del Es-

tado y de su territorio, el cual no deben traspasar nunca.

—¿Cuál es ese límite?

—Es á mi juicio el dejarle agrandar cuanto pueda ser,

pero sin que jamás deje de ser uno con perjuicio de la

unidad.

—Muy bien.

—Y así ordenaremos á nuestros magistrados que obren

de tal manera, que el Estado no parezca grande ni pe-

queño, sino que debe permanecer en un justo medio y

siempre uno.

—Eso no es de mucha importancia.

—De ménos es lo que arríbales recomendamos, cuando

dijimos que era preciso hacer descender á la condición

más humilde al hijo degenerado del guerrero, y elevar

al rango de los guerreros á los hijos de baja condición,

que se hiciesen dignos de ello. Quisimos por este medio

hacerles entender, que cada ciudadano sólo debe aplicarse

á una cosa, aquella para la que ha nacido, á fin de que

cada particular, ajustándose á la profesión que le convie-

ne, sea uno; para que el Estado sea también uno, y no

haya ni muchos ciudadanos en un solo ciudadano, ni

muchos Estados en un solo Estado. ¿Cuál es el límite propuesto para el crecimiento del Estado según los magistrados?

a) No permitir ningún tipo de crecimiento.

b) Agrandar el estado hasta donde sea posible.

c) Mantener un equilibrio entre el crecimiento y la unidad del Estado.

d) Permitir que el estado se divida en múltiples territorios.

7.

MULTIPLE CHOICE QUESTION

5 mins • 10 pts

Página 7, pregunta 7: cada particular, ajustándose á la profesión que le convie-

ne, sea uno; para que el Estado sea también uno, y no

haya ni muchos ciudadanos en un solo ciudadano, ni

muchos Estados en un solo Estado.

—Es cierto que este punto es menos interesante que

el primero.

—Todo lo que nosotros les ordenamos aquí, no es tan

importante como pudiera imaginarse, no es nada. Interesa

solamente observar un punto, el único importante, ó más

bien el único preciso.

—¿Cuáles?

•—La educación de la juventud y de la infancia. Si

nuestros ciudadanos son bien educados y se hacen hom-

bres en regla, verán por sí mismos fácilmente la impor-

tancia de todos estos puntos y de muchos otros que omi-

timos aquí, como todo lo relativo á las mujeres, al matri-

monio y á la procreación de los hijos; y verán, digo, que

según el proverbio, todas las cosas deben de ser comunes

entre los amigos.

—Perfectamente bien.

—-En un Estado todo depende de los principios. Si ha

comenzado bien, va siempre agrandando como el círculo.

Una buena educación forma un buen carácter; los hijos

siguiendo desde luego los pasos de sus padres, se hacen

bien pronto mejores que los que les han precedido, y tie-

nen, entre otras ventajas, la de dar á luz hijos que les su-

peran á ellos mismos en mérito, como sucede con los ani-

males.

—Así debe ser.

—Por tanto, para decirlo todo en dos palabras, los que

hayan de estar á la cabeza de nuestro Estado vigilarán

especialmente para que la educación se mantenga pura;

y, sobre todo, para que no se haga ninguna innovación ni

en la gimnasia ni en la música; y si algún poeta dice

Los cantos más nuevos son los que más agradan (1),

no se crea que el poeta se refiere á canciones nuevas, sino

á una manera nueva de cantar, y por lo mismo no deben

aprobar semejantes innovaciones. No debe alabarse ni

introducirse alteración ninguna de esta especie. ¿Cuál es el punto más importante según el texto?

a) La importancia de la educación de la juventud y la infancia.

b) La necesidad de mantener la pureza en la gimnasia y la música.

c) La importancia de la innovación en la sociedad.

d) La importancia de la igualdad entre amigos.

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