Prueba diagnostica Derecho Penitenciario

Juan es condenado por un delito grave de violencia y se determina que es un peligro para la sociedad. El juez decide imponerle una pena de internación en un centro penitenciario por un período determinado, donde estará privado de su libertad y recibirá tratamiento para su rehabilitación.

• PENA DE TRATAMIENTO MÉDICO AMBULATORIO

• PENA DE VIGILANCIA

• PENA DE INTERNACIÓN

• NINGUNA DE LAS ANTERIORES

Ana es condenada por un delito menor relacionado con el abuso de sustancias y se establece que necesita tratamiento médico para superar su adicción. En lugar de ser internada, el juez le impone una pena de tratamiento médico ambulatorio, lo que significa que Ana deberá asistir regularmente a un centro de salud para recibir tratamiento y seguimiento médico, sin necesidad de ser privada de su libertad.

• PENA DE TRATAMIENTO MÉDICO AMBULATORIO

• PENA DE VIGILANCIA

• PENA DE INTERNACIÓN

• NINGUNA DE LAS ANTERIORES

Carlos es condenado por un delito de hurto y, aunque no es considerado un peligro para la sociedad, el juez decide que necesita supervisión para evitar que reincida. Se le impone una pena de vigilancia, lo que significa que Carlos debe reportarse regularmente a las autoridades, cumplir con ciertas condiciones como mantenerse alejado de lugares específicos o personas, y estar bajo monitoreo para asegurar que cumple con las normas impuestas.

• PENA DE TRATAMIENTO MÉDICO AMBULATORIO

• PENA DE VIGILANCIA

• PENA DE INTERNACIÓN

• NINGUNA DE LAS ANTERIORES

El infractor debe cubrir los gastos judiciales y procesales que se hayan generado como consecuencia del juicio penal. Esto incluye honorarios de abogados, costos de peritos y cualquier otro gasto relacionado con el proceso judicial.

Se refiere a compensar económicamente a la víctima por los perjuicios sufridos, incluyendo daños materiales, morales y psicológicos derivados del delito.

Implica arreglar o compensar el daño físico o material causado por el delito. Si el daño es irreparable, se deberá compensar económicamente a la víctima.

Consiste en devolver las cosas obtenidas mediante el delito a su legítimo dueño. Si la restitución no es posible, se debe pagar su valor.