“Coexistencia pacífica: Principio de política exterior aplicado por la U.R.S.S y otros países del socialismo con el fin de evitar una nueva guerra mundial. El primero en formular la idea de la coexistencia de Estados con distintos sistemas sociales fue Lenin, quien se basó para ello, en la ley del desarrollo desigual, económico y político, del capitalismo. En virtud de dicha ley, el paso al socialismo no se efectúa simultáneamente en todos los países, sino que constituye toda una época histórica, la cual se inicia con la victoria del socialismo en uno o en varios países y acaba con el triunfo del socialismo y del comunismo en todo el mundo. De ahí se desprende la necesidad objetiva de una prolongada coexistencia entre los Estados socialistas y capitalistas (...) La coexistencia de Estados capitalistas y socialistas no significa, como afirman los revisionistas, amortiguar la lucha de clases o conciliar con la ideología burguesa. La coexistencia pacífica es una forma peculiar de la lucha de clases, que se lleva a cabo por medios pacíficos, con la particularidad de que el principal campo de batalla entre socialismo y capitalismo radica en la emulación económica, en la cual el socialismo, gracias a las ventajas que le son inherentes, alcanzará la victoria. Lo que contribuirá a que las ideas del comunismo conquisten las mentes y los corazones de las masas populares no es la guerra con otros países, sino el ejemplo de una organización más perfecta de la sociedad, el florecimiento de las fuerzas productivas, la creación de todas las condiciones para que el hombre alcance la felicidad y el bienestar”. (Fuente N° 9. M.
Rosental y P. F. Ludin, Diccionario Filosófico, 1965). En el texto se observa una interpretación Soviética del principio de coexistencia pacífica que se consolida a partir de 1953 entre las superpotencias beligerantes en la Guerra Fría. ¿Qué conclusión se puede establecer de su análisis?